No hay una definición exacta y oficial, puesto que el significado que se le dé estará siempre influenciado por diferencias culturales, suposiciones y la forma en que las personas relacionan su entorno con la realidad, entre otras cuestiones.
Aun así, en términos generales, se podría considerar que la salud mental es un estado de equilibrio donde se incluye el bienestar emocional, psicológico y social, garantizando siempre que estos aspectos estén cubiertos.
Y afecta directamente a la forma de pensar, sentir y actuar al enfrentarse a la vida. Además ayuda a determinar cómo se maneja el estrés, cómo son las relaciones con los demás y la toma de decisiones.