
¿Hay síntomas palpables después de hacer Biodescodificación? ¿Voy a sentirme peor de lo que estaba o mejor? ¿Realmente gano algo o pierdo mucho?
Si te estás haciendo estas preguntas, he recopilado todas los procesos físicos y mentales por los que han pasado mis clientas tras llevar a cabo una consulta de Biodescodificación.
De esta forma, conocerás los pros y contras y todo lo qué ocurre a corto, medio y largo plazo después de hacer Biodescodificación.
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Este es un mensaje de una clienta que trabajó conmigo sus dolores de espalda.
Y no es la primera vez que recibo un mensaje a mi. A diario, recibo cientos de correos similares tras hacer mis sesiones.
Y todo comenzó con su consulta:
💡 CASO REAL:
«Desde hace unos meses, noto que tengo un dolor de espalda. Es un dolor horroroso, que me impide moverme, sobre todo cuando ha sido un largo día de trabajo. Los médicos me decían que era estrés. Pero pese a todo, el dolor no se iba».
Trajo su consulta y dolor a una de mis sesiones. Y en ella lo vio claro.
¿Qué estás cargando en estos momentos?, le pregunté.
«Con mi familia, a pesar de que yo tengo mi vida y problemas. Mis hermanos siempre vienen pidiéndome ayuda, y no sé decir que no. Y mi madre siempre pide que la cuide, que esté para ella»
Y ya, llegó el bombazo:
«A veces me siento como si fuera la única que puede solucionar todo. Me siento atrapada, pero nunca quiero defraudarlos. Y veo que estoy cargando demasiado».
Estrés encontrado. Lloró todo lo que no había llorado por todo lo que estaba sintiendo.
Pero a los días, me escribió diciéndome que su dolor había desaparecido, y que incluso, se sentía mucho más liviana tras haber dejado atrás ese peso emocional con el que cargaba sobre sus espaldas.
Así que tenlo claro: Entrar al infierno duele, quema, da miedo. Pero si entrases más veces, sabrías lo que puedes descubrir sobre ti.
El entrar o no está en tus manos.
Lo primero es que la Biodescodificación no provoca ningún tipo de síntomas. Aquí desmontamos el primer mito. No es un remedio que puedas ingerir y que tras unos instantes sientas unos efectos secundarios determinados. Lo que sí puede ocurrir después de una sesión de Biodescodificación es que las emociones, los sentimientos y los pensamientos se disparen.
Como biodescodificador he visto reacciones muy distintas. Hay personas que sienten como si se hubiesen quitado un peso de encima. Como si la tensión y el estrés que su cuerpo llevaba acumulando durante tanto tiempo, se hubiese esfumado sin dejar rastro. Dando paso a una paz infinita.
Otras personas en cambio, necesitan recomponerse. Tras tanta contención y retención emocional, una vez han atravesado y desbloqueado su fuente de estrés, sienten un vaivén de sensaciones que les provoca tristeza interna durante un periodo de tiempo.
Pero esto no es un patrón de medida exacta en el que te puedas basar. Como ser humano, eres única y distinta al resto. Y por lo tanto tus emociones y sentimientos fluirán de distinta forma, llevándote a tu propia manera de actuar, procesa y gestionar.
El síntoma en biodescodificación es una fuerte llamada de atención que te hace tu cuerpo para que reacciones y te prestes atención. Normalmente, un síntoma es el preludio de una enfermedad, sea a nivel físico, emocional o mental y trae consigo mucha información. Lo que busca es ser claro contigo y decirte que algo no va bien en ti ahora mismo.
Al vivir con el piloto automático puesto no somos casi conscientes de nuestro presente ni de lo que vivimos, simplemente nos movemos y funcionamos casi por inercia.
No nos detenemos a pensar si algo nos duele, nos molesta o si estamos viviendo una etapa de nuestra vida que no nos gusta.
Un síntoma, como se entiende en biodescodificación, no es más que un grito desesperado para que despiertes y ahondes dentro de ti para así hallar la causa de ese fastidio, de ese malestar y de tanto dolor. Al final, si lo piensas bien, el síntoma aparece, de algún modo, para salvarte, para que te hagas caso y para que te priorices.
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Muy sencillo. Porque el dolor que crees que vas a sentir jamás será comparable al que sientes ahora. Ese malestar está relacionado con un despertar mental y emocional y con los cambios, para mejor, que se vienen a tu vida. Es normal que te sientas algo agitada.
El dolor interno, el que llevas contigo, es diferente. Es fuerte y destructivo. Te lleva al odio, a la frustración y a la amargura. Estás atada de pies y manos, bloqueada y sin salida. ¿Qué prefieres?
La tristeza que se siente tras la biodescodificación es completamente normal a la par que liberadora. Piensa que ese malestar viene porque has visto la verdad que llevas tanto tiempo ocultándote. Y para qué vamos a mentir, la verdad duele. Escuece.
Pero a la vez es reparadora. Es como una transición. Es el paso que has de dar para seguir hacia delante, para cambiar los viejos patrones, para resetear tu cerebro y reprender nuevas conductas más saludables, con un objetivo claro: vivir con la libertad que quieres.
Mi papel durante tu proceso de biodescodificación es guiarte y acompañarte en tu camino. Pero después sigue siendo el mismo. No me voy a desentender ni te voy a dejar sola.
Soy consciente de que el cambio asusta, que enfrentarse al miedo, puede ser doloroso, y que el proceso emocional que se atraviesa es difícil de gestionar. Por eso me gusta seguir en contacto.
Después de la Biodescodificación, cuando pasen unos días, quiero que me cuentes cómo te encuentras, qué has percibido, qué recuerdas..Así, si crees haber perdido el rumbo, podré reorientarte de nuevo en base a la información que tratamos durante la sesión.
Recuerda que no estás sola. Voy a estar siempre acompañándote, cogiéndote de la mano.
La finalidad es que comprendas que se trata de un método diferente al resto que hayas probado, pero más efectivo. Porque tratamos el problema desde la raíz. Nos enfrentamos a tu dolor desde el minuto uno. Para que sepas el por qué de todo lo que te ocurre.
La biodescodificación destapa y te dice qué tienes que corregir. Tras ella, aun sigue quedando trabajo por hacer, por supuesto. Un trabajo personal que depende de ti.
Un trabajo encaminado hacia la madurez emocional y el desarrollo y crecimiento personal.
La verdad que hay después de la biodescodificación es que logres sacar la mejor versión de ti y cambiar todo lo que te hayas propuesto, para conseguir ser más libre y feliz. Y aunque es un trabajo individual, sigo estando para ti todas las veces que lo creas conveniente.
Es muy fácil. Eliges la sesión de Biodescodificación que prefieras, seleccionas el día y la hora que quieres que sea tu sesión, haces click en Confirmar e introduces tus datos de contacto.
Para terminar y pagar, introduce tu cuenta de PayPal en la ventana emergente. Si no dispones de cuenta, no pasa nada, puedes terminar de contratar tu sesión en la plataforma de pagos más segura de todo internet. Haz click igualmente en el botón amarillo de Pagar con PayPal. Luego, se te abrirá una ventana emergente, haces click en el botón blanco de Pagar con tarjeta de débito o crédito e introduce tus datos. Y reserva hecha 😉
No, lo que si debes tener claro es el motivo de tu consulta. Sea el que sea. Si no lo encuentras no te preocupes, durante la sesión y tirando del hilo conseguiremos averiguarlo.
Por supuesto. Incluso te llevas muchas ventajas. Ya que no debes desplazarte por lo que dispones de más tiempo, es mucho más accesible e inmediato y además puedes escoger tu lugar o rincón perfecto para estar relajada y tener el encuentro.
Por supuesto. La información será únicamente la herramienta para nuestro trabajo. No saldrá nada fuera de la consulta.
Deberás mandarme un email a la siguiente dirección: euse@eusealegrecerezo.com con 24 horas de antelación
Un cambio de vida. La biodescodificación busca incansablemente el bienestar de aquellas personas que se vinculan a esta práctica. Con este método se logra una evolución, un crecimiento y un desarrollo personal inigualable.
Te permite conocerte, qué descubras y potencies más cualidades, que te enriquezcas con el aprendizaje, que obtengas herramientas y recursos con los que lidiar con los problemas que se presenten en tu vida, eso sí, con tácticas más saludables tanto para ti como para tu entorno.
En definitiva, con la biodescodificación se consigue encontrar la propia felicidad.
Cuando acudes a una sesión de biodescodificación notas beneficios desde el primer momento. Así que imagínate a la larga todos los resultados que puedes obtener y cómo puede mejorar tu calidad de vida.
Al ser un método en el que, desde el minuto uno ya se consigue detectar lo que te está haciendo sufrir, el proceso y el progreso son más rápidos. Pero no solo eso, la biodescodificación te permite:
Podría seguir, pero prefiero que seas tú misma la que se dé cuenta de lo efectiva que es la biodescodificación.
Cuando el cuerpo se enferma es porque ya lleva mucho tiempo reteniendo y soportando un pesado dolor. Como habrás podido leer anteriormente el síntoma es un aviso para que te pongas alerta.
Cuando nuestro cuerpo se enferma es porque no puede más, realmente no puede ni quiere seguir conteniendo tantas emociones, sentimientos y pensamiento que le alteran y le hacen sufrir un día tras otro.
Evidentemente para que el cuerpo se enferme hacen falta más componentes, pero vivir estresada, nerviosa, ansiosa, alterada, agobiada, enfadada o con un profundo dolor que no sabes ni de donde viene sin intentar ponerle solución y tomarlo como un modo de vida va a traerle a tu cuerpo consecuencias nocivas propiciando que su salud se vea afectada.
He ayudado a cientos de personas y empresarias a conseguir salud, amor y dinero al trabajar el origen emocional de sus problemas físicos y personales.